Películas que dejan huella

sábado, 26 de enero de 2013
Buenas noches. En los últimos días, he visto un par de películas que me han gustado especialmente y que, debido a que no son los típicos estrenos mediáticos hollywoodienses, han pasado bastante desapercibidas por las carteleras españolas. Como me encanta el cine, me encanta descubrir pelis que casi nadie o muy poca gente conoce, y quisiera compartir con vosotros estos dos descubrimientos (y, ya de paso, hablaros de uno de mis directores favoritos, el increíble Wes Anderson).

Descubrimiento nº 1: 50/50
 

Llevo años siguiéndole la pista al actor norteamericano Joseph Gordon-Levitt y, aunque en un principio se me acusara injustamente (mirada mosqueada a mamá) de que me gustaba únicamente por su más que parecido con el desaparecido y muy querido por mi parte Heath Ledger, he decir que este chico no hace más que sorprenderme (para bien) y que poco a poco se está construyendo una carrera sólida y muy interesante que incluye títulos más "vendibles" (como la última entrega de Batman u Origen), con otros menos mediáticos pero muy muy recomendables (entre ellos 50/50).
¿Quieres saber quién te quiere de verdad? Ten cáncer.
50/50 es una comedia dramática (más dramática que cómica) sobre un joven de 27 años (Adam, interpretado por Levitt) al que diagnostican un cáncer muy agresivo de espalda. "¡Menuda diversión!", pensaréis, y sí... tenéis parte de razón, pero lo magnífico de esta peli, lo que me ha llevado a querer recomendárosla y buscar información sobre ella y su proceso de grabación es lo realista que resulta. No es una película que busque la lágrima fácil, no esperéis ver un dramón de sábado por la tarde en la tres porque no lo es. El director, Jonathan Levine, nos ofrece un retrato libre de sentimentalismos y tremendismos sobre cómo en circunstancias extremas, en este caso la enfermedad de Adam, nuestras vidas dan un giro de 180º y paradójicamente, el dolor o el miedo que nos ciega, nos hace también ver de manera diáfana lo que de verdad vale la pena. De la mano de Adam y su proceso de lucha contra la enfermedad, descubrimos sobre la verdadera amistad, el amor, la capacidad de resilencia (ese término que últimamente utilizan tanto en psicología y se refiere a nuestra capacidad para sobreponernos), la familia y la necesidad de vivir cada momento como si fuera el último.
Adam y sus padres en la consulta del médico.
De nuevo os daré la razón si me decís que vuelvo a sonar a cliché "sobremesero" pero no es así porque en 50/50 se mezclan las dosis justas de humor (o media sonrisa), realismo, unos diálogos y escenas que están perfectamente meditadas y, solo cuando es realmente necesario, unos momentos realmente conmovedores, de los que más que hacernos sentir pena nos ponen el nudo en la garganta gracias, sobre todo, a la logradísima interpretación de Gordon-Levitt y unos consortes que también parecen "creados" para sus papeles: Anjelica Houston como sufridora madre, Seth Rogen como amigo graciosete con más trasfondo del que aparenta o Anna Kendrick, que está llamada a hacer grandes cosas si sigue en esta línea que ya emprendió con Up in the Air.
Una película que, como digo en el encabezado de esta entrada, me ha dejado huella y no puedo más que recomendaros.


 
Descubrimiento nº2: Moonrise Kingdom
 
Hablar de descubrimiento en este caso es una soberana mentira. Una de esas que hacen que ahora mismo mi nariz se choque con la pantalla del portátil dificultándome bastante la tarea de seguir tecleando. A Wes Anderson lo sigo desde 2001, es uno de mis directores favoritos y sus películas siempre son motivo de alegría y regocijo interior para mí, así que por eso os digo lo de mentira...
Pero quizá para alguno de vosotros sí lo sea porque Anderson es un director muuuuy peculiar (su universo es claramente reconocible, no hace cine comercial y sus películas son, cuanto menos, "especiales") y porque, normalmente, sus pelis no copan precisamente los multicines españoles.


Suzy y Sam, ¡se quieren!

En este caso, la peli de la que os hablo, su último film, es la historia de un amor preadolescente entre un jovencito scout y una observadora niña con las manos un tanto largas (ver film).
Con un reparto lleno de viejos conocidos (Bill Murray o Jason Schwartzman) y otros que se unen gustosamente a la familia andersiana (Bruce Willis, Frances McDormand, Tilda Swinton, Harvey Keitel y un genialmente sentido Edward Norton), Moonrise Kingdom nos transporta a una pequeña islita donde un narrador con pinta de gnomo (guiño a la indumentaria de sus buceadores en La vida acuática) nos avisa de que en tres días se va a producir una terrible inundación. Con esas 72 horas de margen, acompañamos a un par de niños que se han enamorado, Suzy y Sam, en su aventurera huída: Suzy, de unos padres que no la comprenden, ni se comprenden a sí mismos (el letrado matrimonio formado por Murray y McDormand) y que viven en una casita de muñecas a tamaño real donde la incomunicación es la norma, y Sam de un campamento de scouts donde todos los niños le son hostiles.
A partir de esta premisa, Anderson hace lo que mejor se le da: crear un mundo pintoresco muy muy personal  de colores vibrantes, música de las que se quedan en la cabeza y diálogos en los que demuestra cómo los niños a veces son más adultos que los mismos adultos.
Me ha encantado esa confrontación entre el mundo infantil y el adulto: el primero estructurado y regido por una lógica aplastante; el segundo, lleno de relaciones frustradas y normas rígidas incapaces de permitirles la felicidad.
Los atribulados adultos.
Además, los actores están muy muy bien (no sé qué tendrá Wes que saca lo mejor de todos sus actores) y especialmente me ha gustado la interpretación de la pareja de niños así como de Edward Norton y Bill Murray (¡qué estilismos, por favor!).
Por otro lado, Wes firma siempre sus guiones (de ahí en buena medida que su universo sea tan personal e inequívoco) y este ha sido nominado por la Academia a Mejor Guión Original. La competencia será feroz, pero creo que se merecía la nominación.
En fin, ¡una delicia!

Y hablando de Wes y de lo mucho que adoro el universo de este hombre, no quiero despedirme sin, como os he anunciado antes, recomendaros otras dos joyitas de la casa:


LOS TENENMBAUMS (THE ROYAL TENENBAUMS)
The Royal Tenembaum es la historia de una familia de niños prodigio que, "gracias" a la educación que reciben de sus padres, acaban convertidos en una cuadrilla de desgraciados. Así, como suena. El reparto vuelve a ser de autentísimo lujo y el guión lo firmó a la limón con mi querido Owen Wilson.
Es una película muy original, con momentos en los que te ríes aunque la historia que te cuenta es cruda y su banda sonora, basada en un sempieterno "Hey, Jude" de los Beatles, es inolvidable. Fue la película que me enganchó a Wes Anderson y una de las que veo cada cierto tiempo.


Los Tenenbaums cuando todavía eran felices.



VIAJE A DARJEELING
A Wes le gusta que sus personajes posen en los carteles promocionales. Otra marca de la casa ;)

Y, ¿qué decir de Viaje a Darjeeling? Qué es una gozada (y siento que me repito un poco en esta entrada), qué el trío protagonista está inmenso, inconmensurable, y que Wes lo vuelve a hacer: contar una historia de lo más pintoresca en la que los diálogos son brillantes y los colores... ¡también! Como anécdota, Bill Murray vuelve a aparecer, aunque sea en forma de nostálgico aparte y Anjelica Houston vuelve a su papel de matriarca que tanto ha interpretado para Anderson.

Tres hermano con una misión.

Hasta aquí mi entrada de hoy (que ya os he aburrido bastante). Me encantan las "joyitas" así que, ya sabéis: ¡recomendadme las que queráis!

Mejor Manolo

jueves, 17 de enero de 2013
 
¡Manolito Gafotas ha vuelto! Sí, sí, menuda noticia, Elvira Lindo es una de nuestras autoras más leídas y Manolito su persnaje estrella, pero tenía ganas de gritarlo a los cuatro vientos.
Después de diez años de ausencia, Manolito Gar..., perdón, Manolo García Moreno ha regresado al panorama literario español y lo hace por la puerta grande, brindándonos unas historias tan originales, descacharrantes y entrañables como siempre.
Elvira Lindo, la "mamá" de Manolito
La década de silencio no ha deslucido para nada la voz propia que Elvira creo para Manolito y, es más, su situación, otrora pintoresca porque sus padres estarían endeudados de por vida pagando el camión "Manolito", hoy en día nos presenta una realidad que en mayor menor medida nos atañe a todos. La crisis nos ha igualado a esta familia trabajadora y hoy, si cabe, sus circunstancias son más realistas.
Con Manolito han vuelto los de siempre:
- El Imbécil, su hermano ya no tan pequeño (7 años), rey de la casa... destronado.
- Cata, la madre experta en collejas y que es un misterio que la CIA no haya fichado todavía.
- El abuelo, entrañable personaje, el hombro sobre el que llora y medita nuestro Manolito.
- Manolo (padre), siempre con el camión.
- El Orejones López, cerdo traidor mejor amigo de Manolito que... mejor que lo leáis.
- El Yihad, el chulito del barrio igual de malencarado que siempre.
- La Luisa, su perra la Boni y su marido Bernabé, padrinos de Manolitos.

Y con una nueva, que Elvira nos dejó anotada en el último volumen...
¡¡La Chirli!!
 
La Chirli es la hermanita de Manolito que en la novela tiene ya tres años (porque diez en la vida real han supuesto solo tres en ese mundo mágico que es la literatura) y que no pienso revelaros por qué la llaman así porque es una de las partes que más gracia me hizo de todo el libro (aunque para ser sinceros, me he reído bastante con todos los capítulos).

¿Qué os puedo decir? Pues que crecí con sus aventuras, que recuerdo como si fuera hoy aquel cumpleaños en que me regalaron ¡dos! de sus libros y me sentí la niña más afortunada del mundo porque tenía para leer mucho (y luego me duraron un suspiro) y que estaba deseando saber más de mi familia favorita.

Mejor Manolo es una obra divertida, narrada con la espontaneidad e ingenuidad de ese gran niño que es nuestro Manolito y que consigue que sonrías, rías y que se te olvide todo lo que te rodea. SIgue complementada con los graciosos dibujos de Emilio Urberuaga, que ha sabido captar como nadie ese particular "zoo humano" que rodea a Manolito.

Tal y como está el patio, más libros como éste no estarían de sobra y, que me caiga muerta si miento (como dice Bernabé): seguro que lo cerráis con ganas de más.

Año Nuevo... a hacer listitas

viernes, 11 de enero de 2013
¡Buenas!
Feliz años 2013 a todo el mundo y sí, disculpad que ande un tanto trasnochada y que haga ya 11 días que debí lanzar mi felicitación por el mundo cibernético pero una tiene sus momentos de relax y estas Navidades han constituido una perfecta y necesaria desintoxicación de internet y aledaños. Diría que mis ojos han ganado en salud, pero mentiría como una cosaca porque he sustituido la pantalla del portátil por las páginas impresas de, primero La canción del cielo, un novelón sobre la I Guerra Mundial que se ha colado durante un par de semanas en mis sueños en forma de acosadoras pesadillas de trincheras y zapadores, y ahora con Una vacante imprevista, regalazo de Reyes encargo de mi hermana Noelia que no puede ser más guapa ni tener un hijo (adoptivo y perruno) más precioso (algún día os voy a presentar a mis dos amores perrunos, ya veréis, son adorables). Aunque habría que vivir prácticamente en la Luna para que el título Una vacante imprevista no os sonara de nada, para despistados, os recuerdo que es la primera novela para adultos de la aclamadísima y forradísima J. K. Rowling, madre del mago más famoso del mundo mundial (con permiso de Manolito Gafotas que acuñó esta expresión y de Gandalf, Merlín y Morgana que igual se me mosquean). He de decir que me está gustando mucho pero que, para aquellos que no gocen de memoria fotográfica con los nombres ingleses o que vayan a leerla de manera más o menos entrecortada, sería una idea genial llevar una hojita con los nombres apuntados de quién es quién en este pueblito de Pagford que tan afiladamente nos retrata Rowling.

Escribiré sendas entradas para las dos novelas citadas, pero hoy os traía algo que suelo hacer cada vez que acaba un año y empieza el siguiente: ¡listas!

Mi devoción por las listas me viene de niña, de unos libros infantiles que leí sobre una chiquilla pelirroja y lianta que hacía listas para tooooodo. Más mayorcita me zambullí en el mundo de Alta fidelidad de Nick Hornby y recordé por qué había estado enganchada a enumerar las cosas. (Y ya de adolescente, por si tenía dudas, Alberto San Juan me recordó en Días de fútbol las ventajas de hacer listas de todo, tal y como le decía su padre).

Una vez explicada esta afición por los números o guioncitos ordenados verticalmente, os dejo con dos que siempre siempre hago:

LAS MEJORES LECTURAS DE 2012
Novelas de lo más variado, todas ellas, por un motivo o por otro, me dejaron huella estos últimos meses.

Disfruté muchísimo con las aventuras de este optimista nato y su cuadrilla estrafalaria.

Intensísima, como todo lo que escribe esta autora. Tiene un giro de 180º inesperable.

Me dejó tocadísima. Yo sí podría haber protagonizado una foto con kleenex incorporado como las de promoción de Berto Romero y Joaquín Reyes.

Un best-seller que no me extraña que haya arrasado tanto. Una lectura muy entretenida.

El descubrimiento del año: esta autora salmantina que acaba de publicar su segunda novela (ver más abajo).

Muy emocionante. Y su autor, una joya, tuve la suerte de participar en un club de lectura con él y es una persona maravillosa.

¡Conozco a esta chica! Es bibliotecaria en la uni de Alicante y se ha currado una novela muy adictiva.

Me encantó esta disección de los felices 20... y lo que pasó después.

Follet y su manera de hacerme sufrir con malos malísimos.

Sobre la Guerra de Secesión estadounidense, un gran amor y el valor de las promesas. Una autora con una pluma maravillosa y sorprendente.

Toda una sorpresa. Me lo pasé pipa leyendo sober carteles mexicanos y yanquis pijos y buenorros.
 
Segunda novela y segundo acierto. Genial novela a la que dediqué una entrada hace unas semanas.

¡Construyamos un monumento a este hombre! Uno de mis autores más apreciados con la segunda parte de su esperadísima trilogía. Me fascina su prosa elegante y llena de juegos lingüísticos.

Opresiva, asfixiante, aterradora... menudo sorpresón después de las novelitas ligeras de Glattauer. No la podía soltar.
 

LAS MEJORES PELÍCULAS VISTAS EN 2012
He especificado "vistas" porque no todas son estrenos del año pasado, pero sí las vi a lo largo de 2012 por primera vez.

Sugerente propuesta distópica. ¿Qué pasaría si en un futuro la moneda de cambio fuera... tiempo de vida?

Una buena peli para quemar calorías (acaban de demostrar las propiedades deportivas de las buenas pelis de terror) y ver dos veces porque tiene mucha miga.

Tuve el privilegio de ver un pre-pre-prestreno y ¡me enamoré! Ya lo había hecho del libro; la peli es también una delicia.

Aunque mi hermana se extrañó porque a ella no le dio miedo... ¡qué mal lo pasé! Ya se prepara la segunda parte.

La mejor peli que he visto en muchísimo tiempo. Owen Wilson se sale y el guión de Woody Allen es de los mejores que he tenido el placer de disfrutar.

Guión y dirección de uno de mis actores favoritos rodeado de un reparto de lujo. Sus dos horas y media se hacen cortas.

Una peli de dibujos para adultos con muy mala baba.

Espero no verme nunca reflejada en esta escritora de novelas young-adult afincada en una eterna adolescencia.

Sorprendente película que he devorado varias veces y siempre se me hace corta.

El éxito de la temporada en Francia, una comedia con buen corazón para echarse unas risas.

Ewan y Emiliy están genial con un guión del todo original. Me encantó.

¡Divertidísima! Fue la sorpresa del año, hasta lloraba de la risa.

La peli con la que descubrí que George Clooney se gasta las mismas piernecicas musculosas y sin pelo que mi padre. Un guión original y unas interpretaciones muy logradas.

Advertencia: no me gustan las pelis de súper-héroes. Y, sin embargo: ¡me lo pasé bomba con esta! Eso sí, el malo me daba risa.


No es lo mejor de Tim Burton, pero solo por el estilismo, la música y lo arriesgado de la apuesta, merece la pena.

Una historia muy divertida sobre los orígenes del vibrador con dos de mis actores preferidos.
Qué rato más divertido, por favor. Me encanta cómo Aniston, Farrell y Spacey se caricaturizan y se transforman en unos jefes muy pero que muy odiosos.

Bueno, estas son mis listas-resumen de 2012. ¿Cuáles son las vuestras?